Iberdrola aplicará en su parque Wikinger el proyecto Romeo, un proyecto de I+D centrado en la reducción de costes de operación y mantenimiento para la mejora de la eficiencia en el sector de la energía eólica offshore.
Wikinger será el escenario de pruebas de uno de los tres proyectos piloto que se desarrollarán en el marco de esta iniciativa, que está siendo financiada por el Programa Horizonte2020 de la Unión Europea y liderada por Iberdrola.
El proyecto ROMEO, que arrancó en junio de 2017, tiene como misión reducir los costes de operación y mantenimiento en los parques eólicos offshore por medio de estrategias y sistemas de monitorización avanzadas, así como analizar el comportamiento de las turbinas eólicas en tiempo real.
El consorcio del proyecto, compuesto por compañías y entidades europeas, que cubren toda la cadena de valor del sector, trabaja en el desarrollo de una plataforma analítica y de gestión que permitirá mejorar el proceso de toma de decisiones con el fin de facilitar la evolución de las 2 estrategias actuales de Operación y Mantenimiento (O&M) basadas en correctivos a novedosas estrategias basadas en el estado real y de degradación de los componentes de las principales estructuras del parque.
Asimismo, Romeo desarrollará una plataforma centrada en la nube y el Internet de las Cosas que albergará modelos para diagnosticar y predecir los fallos de los sistemas. Esta plataforma permitirá comprender mejor el comportamiento en tiempo real de los principales componentes de los aerogeneradores en operación y su estado actual. Con este sistema se podrá extender su vida útil y se reducirán sus costes de operación y mantenimiento.
Las innovaciones del proyecto serán probadas también en los parques eólicos de Teeside, ya en funcionamiento y en East Anglia 1, este último propiedad también de Iberdrola.
El proyecto Romeo, que finalizará en el año 2022, está constituido por un consorcio compuesto por 12 entidades, procedentes de 6 estados miembros de la UE y un país asociado. Además de Iberdrola Renovables Energía, que lidera el proyecto, el consorcio incluye a grandes empresas (Electricité De France, Adwen, Siemens Gamesa, Ramboll, IBM Research Zurich, Indra, Bachmann Monitoring), pymes (Laulagun Bearings, Uptimer Engineering, Zabala Innovation Consulting), y la Universidad de Cranfield.
El parque de Wikinger, con un total de 350 MW de potencia instalada, será capaz de suministrar energía renovable a unos 350.000 hogares, cuyo consumo equivale a más del 20% de la demanda de energía del estado de Mecklemburgo-Pomerania Occidental, donde está ubicado el parque.
Con una inversión cercana a los 1.400 M€, Wikinger ahorrará a la atmósfera casi 600.000 t de CO2 al año.
Iberdrola instala el primer aerogenerador del parque eólico marino Wikinger
Durante la construcción del parque se fijaron al lecho marino 280 pilotes construidos por la empresa asturiana Windar. Asimismo, las 70 jackets fueron fabricadas por Navantia, en los astilleros de Fene, A Coruña, y por el empresa danesa Bladt, en Lindo, Dinamarca. En cuanto a las turbinas, modelo AD 5-135 de 5 MW de potencia unitaria,, fueron desarrolladas por Siemens Gamesa en sus plantas de Bremerhaven y Stade en Alemania.
La subestación Andalucía ya está instalada en el parque eólico offshore Wikinger