Las crecientes demandas de la legislación ambiental están conduciendo a una nueva transición en la naturaleza de los combustibles marinos.
Un nuevo documento que complementa y sirve de guía para la normativa ya existente sobre el uso de determinados combustibles ha sido publicado por la Organización Internacional de Normalización (ISO), en donde se recogen las consideraciones para los proveedores y usuarios de combustibles respecto a la calidad del combustible marino, en vista de la implementación de un máximo de 0,50% de azufre en 2020.
Dicho documento fue desarrollado fruto de la colaboración entre propietarios, operadores de buques, sociedades de clasificación y petroleras entre otros, como resultado de la implementación de un máximo del 0,50% en masa de azufre en combustibles marinos en 2020 para operar fuera de las áreas de control de emisiones (ECA).
La reducción de emisiones de SOx de la combustión del fuel oil a bordo de los buques pertenece al Anexo VI del MARPOL. Este proceso de reducción de emisiones se puede lograr mediante el uso de combustibles con un contenido de azufre más bajo o al operar en un medio alternativo equivalente aprobado (Como depurar gases de escape).
En el nuevo documento de la ISO se abordan las consideraciones de calidad con respecto a las emisiones de SOx que se aplican a los combustibles marinos teniendo en cuenta la vigencia de la norma ISO 8217 para dichos combustibles.
Además proporciona consideraciones sobre la compatibilidad entre combustibles e información adicional.
Estos nuevos límites han llevado a la Asociación internacional de suministradores de combustibles marinos (IBIA) a desarrollar un nuevo tipo de combustible catalogado como VLSFO (Very Low Sulphur Fuel Oil), que se convertirán en la alternativa del IFO380 utilizado hasta ahora.