Hyundai Mipo Dockyard está construyendo un buque que no necesita sistema de tratamiento de agua de lastre pues podrá mantener su trimado y asiento gracias a su sistema de propulsión.
Hyundai Mipo Dockyard (HMD) tiene previsto entregar el primer buque de transporte de GNL libre de agua de lastre a finales de este año.
El buque de 7.600 m3 fue encargado por el armador alemán Bernhard Schulte Ship a finales de 2016 y actualmente está en construcción en el astillero de HMD en Ulsa bajo la sociedad de clasificación Lloyd’s Register.
El agua de lastre es esencial para la seguridad del buque, pero representa una amenaza ecológica, económica y sanitaria debido al gran número de especies que pueden ser trasladadas. Con la entrada en vigor del Convenio de Gestión del Agua de Lastre de la OMI en septiembre de 2017, todos buques construidos a partir de esta fecha deberán contar con un sistema de tratamiento de agua de lastre en el lugar de descarga.
HMD está trabajando para resolver este problema, y por ello está desarrollando un buque que no necesita de un sistema de tratamiento de agua de lastre. Para ello ha prestado atención al diseño de casco aumentando la altura de la astilla muerta, al diseño de la cámara de máquinas y de la superestructura de la habilitación y puente situados a proa. Además el buque está equipado con un sistema de propulsión azimutal (dos unidades) para que mantenga su estabilidad en caso de daño y pueda controlar el asiento y el trimado sin lastre.
El primer obstáculo fue mantener la velocidad del buque al aumentar la astilla muerta. Por lo general, la astilla muerta mejora la estabilidad del buque, lo que es crítico en este diseño, pero también se ve afectada la velocidad de navegación. Por ello se centraron en el diseño de las formas del casco y han desarrollado unas que mejoran el rendimiento según los ensayos del modelo en canal.
Otra característica clave de este buque es su sistema de propulsión, formada por dos propulsores azimutales, con unos diámetro de hélices menores que en otros tipos, permanecen completamente sumergidas en todas las condiciones de operación del buque.
El GNL se almacena en dos tanques independientes tipo C a -165ºC y 3,75 bar. El caudal del gas transferido será de 1.250 m3/h a través de mangueras flexibles criogénicas. Además, el boil-off generado o el gas evaporado será comprimido hasta los 220 bar, almacenándose en dos contenedores de 40 pies para su posterior uso en la propulsión y/o generación de electricidad.
El concepto de buque “sin lastre” no necesitará de la instalación de sistemas para el tratamiento del agua de lastre y eliminará la necesidad de cumplir con la normativa PSPC sobre el revestimiento de los tanques de lastre y la regulación asociada a ella, viéndose reducidos los costes de mantenimiento.
Imágenes: © Lloyd’s Register