La Salvamar Libertas operará desde su puerto base en Puerto Portals. Os dejamos el vídeo que ha compartido Salvamento Marítimo de esta nueva embarcación.
Salvamento Marítimo, dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, ha incorporado una nueva embarcación, la Salvamar Libertas, que va a operar desde su puerto base en Puerto Portals (Mallorca).
Esta embarcación sustituye a la Salvamar Acrux, que a partir de ahora estará prestando servicio en Ibiza.
La nueva Salvamar, construida en los astilleros de Auxiliar Naval del Principado, ha supuesto una inversión de 2,1 millones de euros.
El nombre de Libertas se debe a una estrella situada en la constelación del Águila (Aquila), a unos 184 años luz del Sistema Solar. La mayoría de las 55 Salvamares con las que cuenta Salvamento Marítimo distribuidas por el litoral español tienen nombres de estrellas.
Características técnicas
Las salvamares son las unidades más versátiles de nuestra flota por su alta velocidad, gran maniobrabilidad y poco calado, apropiadas para actuar en circunstancias en que la rapidez de respuesta juega un papel fundamental. Alcanzan velocidades superiores a los 35 nudos y están construidas en aluminio y con francobordo bajo, lo que las hace apropiadas para recoger náufragos del agua, además de dar remolques y asistencias.
La Salvamar Libertas, de 21,50 metros de eslora y 5,5 de manga, incorpora como novedad un sistema de posicionamiento dinámico con capacidad de mantenimiento automático de la posición y movimiento controlado, así como una sonda de barrido multihaz en 3D con alcance de hasta 300 metros de profundidad.
Esta nueva unidad ha alcanzado una velocidad máxima de 40 nudos en pruebas y tiene 400 millas náuticas de autonomía, con 2 motores de 1.029 kW, un desplazamiento a plena carga de 36 toneladas, una potencia de tiro a punto fijo de 6 toneladas y una capacidad de combustible de 4.800 litros.
Los medios de Salvamento Marítimo se hallan estratégicamente situados a lo largo de las costas españolas atendiendo a criterios de efectividad basados en conseguir minimizar los tiempos de respuesta para realizar una mejor cobertura y actuación eficaz, adecuada a las previsiones de ocurrencia de siniestros que proporciona el estudio y análisis de las estadísticas recientes. Este ejercicio es continuo y puede dar lugar a una redistribución de los medios de salvamento si las condiciones así lo exigen.