Con este sistema se conseguirá impulsar el gas de las reservas en los pozos satélites Midgard y Mikkel,cuya presión natural está disminuyendo,permitiendo así la continuidad de una producción estable. La compresión es necesaria para asegurar la alta fluidez del gas y una tasa elevada de recuperación. Esto posibilitará que se puedan recuperar 280 millones de barriles equivalentes de petróleo adicionales.
Los compresores se instalarán cerca de las cabezas de pozos para incrementar la presión. El flujo de ambos pozos,ubicados a una distancia de 50 y 70 km respectivamente,será bombeado a través de una línea común hacia la plataforma Åsgard B.
La compresión submarina aportará muchos beneficios comparados con la alternativa de instalar una nueva plataforma,incluyendo la mejora de la recuperación,reducción de gastos operativos y de capital,del impacto medioambiental y el aumento de la seguridad en las operaciones.
El proyecto,creado en 2010,está siendo operado por Statoil y realizado por Aker Solutions,traerá consigo una innovadora tecnología para la industria a nivel mundial.