El Grupo de Contaminación Marina y Efectos Biológicos (CMEB) del Centro Oceanográfico de Murcia del IEO está colaborando junto con investigadores de la City University of Hong Kong y la Universidad de Hong Kong, para realizar un estudio con la intención de medir la contaminación marítima mediante el uso de mejillones artificiales evitando el ruido ambiental. Los mejillones artificiales emulan a los naturales en el proceso de acumulación de metales pesados.
Se denomina ruido ambiental a aquellos factores que afectan al estado fisiológico del mejillón como la temperatura y salinidad cambiantes, la posible presencia de parásitos, el ciclo reproductivo, la disponibilidad de alimento, etc. Estos factores afectan a la capacidad de acumular y excretar los metales pesados de los mejillones, y por ello el uso de bivalvos artificiales.
El uso de poblaciones naturales de mejillón para la evaluación de la contaminación química está extendido en diferentes países del mundo. Esta actividad está respaldada y patrocinada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA.
A nivel nacional contamos con el Programa MED POL en el Mediterráneo que monitorea el ambiente marino y que estudia la contaminación de los mares y costas españolas.
Además, el uso de mejillones artificiales facilita el monitoreo en lugares estratégicos donde no existen poblaciones naturales de estos bivalvos.