La granza es el resultado obtenido de reciclar materiales plásticos usados.
La granza se transporta por mar en contenedores.
La persistencia de la granza de plástico en un medio acuático puede medirse durante décadas o incluso durante más tiempo, ya que la granza de plástico no es biodegradable.
Por otra parte, en 2022, alrededor del 38 % de la granza de plástico que se transportó en la UE se hizo por vía marítima.
Entre las obligaciones está garantizar envases de buena calidad y suministrar información relativa a la carga y otra información técnica.
Esto se añade a las obligaciones relacionadas con el transporte de granza de plástico por carretera, ferrocarril y vías navegables interiores, tal como se establece en la propuesta de la Comisión.
Para facilitar el cumplimiento de las normas sobre transporte marítimo, el Consejo ha acordado aplazar un año su aplicación (en comparación con el resto de las normas establecidas en el Reglamento).
Además, si la Organización Marítima Internacional adopta medidas para abordar la contaminación marina causada por granza de plástico procedente de buques, el Reglamento debe modificarse, en consecuencia, a propuesta de la Comisión.
La nueva normativa contribuirá a mejorar la manipulación de la granza de plástico en todas las etapas de la cadena de suministro. Esto podría reducir hasta un 74 % las pérdidas de plástico al medio ambiente.
Ámbito de aplicación del Reglamento
El presente Reglamento se aplica a:
- los operadores económicos que hayan manipulado granza de plástico en cantidades superiores a cinco toneladas en la UE;
- los transportistas de la UE y de fuera de la UE que transporten granza de plástico en la UE;
- las empresas encargadas de la limpieza de contenedores y cisternas de granza de plástico (añadido por el Consejo en su orientación general);
- expedidores, operadores, agentes y capitanes de buques aptos para la navegación marítima que zarpen de un puerto de un Estado miembro o hagan escala en él (añadido por el Consejo en su orientación general).
El Consejo mantiene el planteamiento de la Comisión de que la nueva normativa se aplicará en todas las etapas de la cadena de suministro.
Certificación obligatoria y declaraciones responsables
Con arreglo a las nuevas normas, las autoridades nacionales tendrán que llevar a cabo inspecciones medioambientales y adoptar otras medidas de verificación como parte de un enfoque basado en el riesgo.
Para demostrar su conformidad con estas normas, los operadores de mayor tamaño tendrán que obtener un certificado de conformidad expedido por terceros independientes. Según la orientación general, todas las empresas (con excepción de las microempresas) están sujetas a esta obligación si manipulan más de 1 000 toneladas al año. El Consejo ha concedido a las pequeñas empresas cuatro años para cumplir esta obligación.
Las empresas que manipulen menos de 1 000 toneladas al año tendrán que expedir una declaración responsable de conformidad.
Como alternativa, la orientación general permite a los Estados miembros garantizar el cumplimiento a través de los sistemas nacionales de permisos ya establecidos.
Además, el Consejo ha añadido la obligación de que las autoridades faciliten acceso gratuito y público a la información relativa a la manipulación de granza de plástico.
Siguientes etapas
La orientación general acordada hoy formaliza la posición negociadora del Consejo. Se espera que las negociaciones con el Parlamento Europeo sobre la forma definitiva del Reglamento comiencen a principios de 2025.
Documentos de interés
- Orientación general sobre el Reglamento relativo a la prevención de las pérdidas de granza de plástico para reducir la contaminación por microplásticos
- Conclusiones del Consejo «Hacer que la recuperación sea circular y ecológica»
- Plan de Acción «Contaminación Cero» (Comisión Europea)