
Las fuentes del ruido en el océano incluyen el transporte marítimo,la exploración sísmica,y las actividades de construcción,como son las obras de extensión de puertos o parques eólicos offshore. Existe la preocupación de que los elevados niveles de contaminación acústica subacuática a escala mundial puedan tener un impacto en la vida marina interfiriendo con la comunicación,causando cambios en el comportamiento y elevando los niveles de estrés.
Por primera vez los científicos marinos trabajarán juntos para crear una evaluación inicial de los antecedentes de los niveles de ruido en aguas inglesas,incluyendo patrones anuales y estacionales,así como diferencias espaciales. El trabajo,subvencionado por Defra and Marine Scotland,ayudará a informar acerca del desarrollo del seguimiento del ruido,como parte del compromiso del país con la Directiva Marco sobre la Estratégico Marina de la UE (EU Marine Strategy Framework Directive,MSFD),que tiene como objetivo lograr el buen estado ecológico de los mares europeos para el 2020.
Varias organizaciones científicas marinas,académicas y gubernamentales del Reino Unido serán consultados para hallar un enfoque eficaz a la hora de establecer un programa de seguimiento sobre el ruido. Los resultados y recomendaciones finales derivadas del proyecto estarán disponibles a principios del próximo año.
Foto de MSS: Despliegue de un registrador de ruido subacuático como parte del proyecto ECOMMASS de MSS,que está contribuyendo a la aportación de datos de la red del Reino Unido.