Oceana,grupo internacional que trabaja para la conservación de los de los océanos,ha publicado un nuevo informe,“Wasted Catch: Unsolved Bycatch Problems in U.S Fisheries”,denunciando nueve de las pesquerías más sucias de los Estados Unidos. Desechan casi la mitad de lo que capturan y son responsables de más del 50% de las capturas accidentales en EEUU,hiriendo y matando miles de especies protegidas y en peligro de extinción cada año.
Según Cano-Stocco,director de esta campaña en Oceana,la reducción de la pesca accidental sería un triunfo tanto para pescadores como para ecologistas,eliminando prácticas pesqueras dañinas y derrochadoras podríamos restablecer y mantener las poblaciones de pescado que son esenciales para la reanudación de la abundancia y la salud de los océanos,mientras evitamos la muerte innecesaria de ballenas,delfines,focas y tortugas.
La campaña llevada a cabo por Oceana ha pedido al gobierno federal llevar a cabo tres acciones para tal fin: 1) Contar todo lo que es pescado en una pesquería,incluyendo las especies que no son objeto de captura. 2) Poner un tope en la cantidad de captura desechada en cada pesquería usando límites con base científica,y 3) Controlar y evitar la pesca accidental mediante mejoras como el uso de artes de pesca más limpias y mayor vigilancia.