Se trata de una alianza por la que la Marina nórdica se ha comprometido a encargar a los astilleros públicos españoles la actualización y la reparación de todos los sistemas suministrados por Navantia durante la construcción de las cinco fragatas.
Este acuerdo tiene un periodo inicial de un año,en el que se realizará el mantenimiento del IPMS (Sistema Integrado de Control de Plataforma),de los motores propulsores y generadores,con «la posibilidad de incluir bajo este acuerdo el resto de equipos y sistemas». Las fragatas tendrán una vida operativa de al menos 30 años,con lo que la importancia de este acuerdo está en las posibilidades de futuro.
Bajo ese acuerdo también se podrán incluir el resto de equipos y sistemas de la plataforma de los buques.