Los pecios en mejor estado de conservación del mundo sin duda son las 60 embarcaciones halladas en mar Negro. Los avances tecnológicos actuales han permitido que las imágenes obtenidas de estos pecios sean realmente extraordinarias. Os dejamos varios documentales.
El mar Negro, de 411.500 km2 y una profundidad máxima de 2.244 m, está caracterizado por su escasa salinidad, aproximadamente la mitad que la del mar Mediterráneo, las aguas de sus profundidades son pobres en oxígeno y a partir de los 200 m la vida no es posible.
Os refrescamos esta información ya que es la causa principal del buen estado de conservación en el que se encuentran los 60 pecios de más de 2.500 años de antigüedad pertenecientes a los Imperios romano, bizantino y otomano, con los que se toparon los científicos del Proyecto de Arqueología Marítima del mar Negro.
Muchas de las actividades comerciales de la antigua Grecia, Roma y del Imperio Bizantino se llevaban a cabo en el mar Negro.
El Proyecto de Arqueología Marítima del mar Negro, liderado por el Centro de Arqueología Marítima de Southampton, y de participación internacional, se centraba en la investigación geofísica del mar Negro. Sin embargo, se tropezaron con el “Atapuerca” del mar al ir a estudiar los efectos del cambio climático a lo largo de la costa búlgara del mar Negro.
Para los científicos es un descubrimiento sin igual, ya que muchos de estos buques sólo se conocían por dibujos o descripciones en textos antiguos. Responsables de este proyecto comentan que aún se conservan cuerdas, las tallas de las maderas, etc.
La expedición científica a bordo del buque Stril Explorer ha desplegado dos robots submarinos a más de 1.800 m de profundidad en el mar Negro desde 2015. Uno de estos ROV está equipado con una cámara 3D de alta resolución. El otro ROV, el Surveyor Interceptor, explora el fondo marino cuatro veces más rápido que cualquier ROV convencional (a más de seis nudos). Está equipado con una amplia gama de instrumentación geofísica, luces, cámara de alta definición y un escáner láser.