Dinamarca podría tener uno de los parques eólicos offshore más grandes del mundo, si el gobierno encuentra la forma.
La iniciativa es parte de una propuesta energética muy esperada por parte del gobierno, y cuyos resultados saldrán a la luz a lo largo de esta semana.
Este parque jugará un papel principal para conseguir los objetivos políticos de al menos la mitad del consumo energético de Dinamarca, para ser sostenible en 2030. Estaría ubicado como mínimo a unos 50 km de la costa para evitar contaminación visual y auditiva.
Se pretende conseguir con este parque una producción de 800 MW y que sea capaz de suministrar suficiente energía para abastecer de electricidad a siete de las grandes ciudades de Dinamarca. Para alcanzar este nivel de producción será necesario entre 50 y 75 aerogeneradores de unos 250 m de altura.
Mientras la planificación del parque no estará lista hasta dentro de unos seis años, el contratista deberá estar preparado para 2021. El gobierno piensa que el parque puede construirse sin financiación pública, sin contar con los costes asociados a la necesidad del tendido de cables para conectar el parque a la red terrestre.
El gobierno espera presentar proyectos eólicos adicionales para el 2022, dependiendo de la potencia extra necesaria.
El parque eólico offshore más grande que hay actualmente es el proyecto Kriegers Flak, con una potencia de más de 600 MW, y se espera que finalice su construcción para 2021.