Ørsted, en colaboración con WWF Denmark, está realizando un proyecto para determinar cómo los arrecifes de impresión 3D pueden beneficiar la biodiversidad en el estrecho de Kattegat. Se trata de una zona marítima entre Dinamarca y Suecia que está experimentando una población de bacalao históricamente baja. Debido a esta amenaza, se están poniendo en marcha proyectos que ayuden a la recuperación de la biodiversidad marina.
El proyecto está en marcha, y para ello se han colocado una docena de estructuras que simulan arrecifes de coral. El lugar idóneo para llevar a cabo este proyecto ha sido en el lecho marino, entre las turbinas eólicas del parque eólico marino de Anholt.
Se espera que los arrecifes de impresión 3D artificiales creen hábitats para que el bacalao prospere y contribuya a un ecosistema marino más saludable y resistente.
El problema de la biodiversidad en Kattegat
Debido a años de sobrepesca, un aumento del agotamiento de oxígeno cerca del lecho marino y la pérdida de hábitat han llevado a una disminución de la población de bacalao en el estrecho de Kattegat en los últimos 20 años. La población de bacalao es, en estos tiempos, alarmantemente baja. Esto causa un desequilibrio y produce un impacto en todo el ecosistema de la zona. El bacalao es un depredador de los cangrejos verdes, y, al no ser cazados por la falta de este pez, aumenta su población. A su vez, los cangrejos verdes, comen las semillas de hierba marina y caracoles. Esto produce un crecimiento excesivo de las algas. Por tanto, se produce un efecto dominó que perturba la biodiversidad de la zona y la cambia.
La importancia de la hierba marina en esta zona es la de preservar a otros peces pequeños en proceso y crecimiento. Y, algo más importante, la de producir oxígeno para la zona, lo que estabiliza el lecho marino. La hierba marina, además, almacena carbono de manera muy efectiva en su red de raíces, lo que evita que termine en la atmósfera y contribuya al aumento de la temperatura global. Se genera, no solo un efecto en cadena, sino también un efecto cíclico que se retroalimenta negativamente.
La biodiversidad marina en Dinamarca está en bajos históricos. Hoy en día hay un 90% menos de bacalao en el Kattegat que en 1990. Por tanto, es necesario actuar, y con urgencia. Este proyecto probará las nuevas y únicas estructuras de arrecifes impresas en 3D en Dinamarca por primera vez.
Los arrecifes de impresión 3D ofrecen una solución innovadora
Los arrecifes de impresión en 3D que se han desplegado ya en el lecho marino de Kattegat aumentarán la cantidad de hábitats para el bacalao, con un efecto positivo en el stock de especies para, a su vez, contribuir a un ecosistema marino más saludable.
Estos arrecifes son biocompatibles y están hechos de materiales naturales. Estos no serán dañinos para el medio ambiente circundante, y su forma es similar a la de una tarta de bodas, con aberturas que permiten que los peces entren y salgan de estos escondites simulados.
Las estructuras también proporcionarán una superficie dura y grietas a las que se pueden adherir otros organismos.
Los arrecifes de impresión en 3D tienen un tamaño de aproximadamente 1 metro cúbico y pesan hasta media tonelada. Se han construido con una manera variada para imitar mejor los arrecifes naturales.
Los arrecifes impresos en 3D también están destinados a complementar los arrecifes de rocas existentes que se establecieron durante la construcción del parque eólico marino de Anholt en 2012.
El objetivo de la instalación de estos arrecifes de piedra era crear oasis atractivos para las especies marinas en un fondo marino que de otro modo sería árido. Ahora, una década después de que se establecieran los arrecifes de piedra, están llenos de vida.
Por eso, se prevé que los nuevos arrecifes impresos en 3D complementen los arrecifes de rocas, creando un ecosistema marino más saludable y resistente para el bacalao.