GhostSwimmer es el último de una serie de proyectos de ciencia ficción llevados a la realidad desarrollado por el jefe de operaciones navales de Rapid Innovation Cell (CRIC),y llamado proyecto Silent NEMO. Se trata de un experimento que explora los posibles usos de la biomimética. Este artilugio,del tamaño y forma de un atún,ha estado recopilando información en dicha base sobre mareas,corrientes,estelas y condiciones meteorológicas para el desarrollo de futuras tareas.
Este proyecto ayudará a permitir a la Armada a llevar con éxito más tipos de misiones manteniendo la seguridad de tripulación y buzos. El robot con forma de pez,está diseñado para imitar la manera de moverse en el agua de un gran pez. Tiene una eslora aproximada de 1,5 m,pesa alrededor de 50 kg,y puede operar a profundidades de 90 m.
La biomimesis proporciona seguridad extra durante las misiones de baja visibilidad de inteligencia,reconocimiento y vigilancia (ISR) e inspecciones de buques. Tiene autonomía para largos periodos de tiempo debido a su batería de larga duración. Sólo puede ser controlado mediante un ordenador conectado a una distancia de 150 m,distancia suficiente para transmitir información durante la inspección de un casco,pero sin conexión el robot tendría que ser recuperado en la superficie para volcar los datos.