Atair, cuya construcción ha durado 16 meses, es un buque destinado a la búsqueda de naufragios y estudios submarinos.
El pasado 28 de febrero se produjo la flotadura del buque Atair, el primer barco de exploración propulsado por gas natural licuado (LNG) tras un período de construcción de 16 meses. El barco fue construido para la Agencia Federal Marítima e Hidrográfica (BSH) alemana y el contratista general fue el astillero Fassmer. El casco y la superestructura, así como partes del equipamiento, se construyeron en German Naval Yards Kiel. El buque de inspección está concebido para utilizarse en la búsqueda de naufragios y en estudios submarinos.
La propulsión con LNG, considerada la tecnología del futuro en la industria del transporte marítimo, es una característica muy innovadora en Atair. El buque usará LNG en lugar del diésel habitual, lo que hace a Atair más respetuoso con el medio ambiente reduciendo en un 90% las emisiones de SOX, en un 80% las de NOX y eliminado la emisión de partículas sólidas.
El director ejecutivo de Fassmer, Harald Fassmer, ha comentado que la construcción de este buque ha sido muy compleja, y que gran parte del armamento está aún por realizar. El remolque de Atair al astillero Fassmer está programado para mediados de marzo, dónde se finalizarán todos los trabajos pendientes.
A su vez, Jörg Herwig, director general de German Naval Yards Kiel, ha destacado la complejidad del buque y la exigencia técnica para cumplir los plazos y el presupuesto establecido.
Una vez se realicen las pruebas de mar y puerto de Atair, está previsto que la entrega de este buque a la BSH se realice en la primavera de 2020.