Las medidas que se están tomando mediante el satélite Cryosat en la Antártida revelan que alguna zona del continente,más concretamente la región conocida como “hielo azul” se está elevando.
Estas medidas se han podido registrar mediante sofisticados GPS que han sido instalados en trineos. El equipo de expertos ha conseguido obtener un mapa que refleja los cambios en la altura del hielo en una superficie de 2.500 km2.
El mecanismo para obtención de los datos se ha conseguido gracias al altímetro del satélite Cryosat. Las señales de radar emitidas rebotan en la superficie pulida que supone el hielo y vuelven al satélite,de manera que se pueda determinar la altura del hielo en función del retardo en la recepción de la señal.
Por ahora son datos puntuales y como comenta Reinhard Dietrick,uno de los investigadores,“los resultados por supuesto son preliminares,pero será muy interesante ver si este aumento en altura se mantiene en el futuro”.