Navantia San Fernando botó el pasado fin de semana la cuarta corbeta para Arabia Saudí.
El presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, ha calificado el programa de estratégico y ha expresado la disposición de la compañía para futuras oportunidades.
Esta corbeta está siendo construida en el astilleros de Bahía de Cádiz para la Marina Real de Arabia Saudí (RSNF), que lleva el nombre de Jazan, en homenaje a esta ciudad del suroeste del país.
La ceremonia de botadura se desarrolló con medidas de seguridad sanitaria.
El evento comenzó con una lectura del Corán, seguida de la proyección de varios vídeos, sobre la ciudad de Jazan (que da nombre al barco), sobre el programa Avante 2200 y sobre la construcción de esta cuarta corbeta.
El encargado de dar la bienvenida fue el director del astillero y responsable de Defensa de Navantia en la Bahía, José Antonio Rodriguez Poch.
En la ceremonia, el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, ha subrayado el compromiso de Navantia con este programa, que ha calificado de “estratégico” para la compañía, y con Arabia Saudí: “Pueden contar con Navantia como un socio fiable para el mantenimiento de los buques en su ciclo de vida y para futuras oportunidades”.
Ricardo Domínguez puso en valor las inversiones que Navantia está acometiendo para digitalizar e introducir nuevas tecnologías en el astillero para hacerlo “más eficiente” y “construir buques en menor tiempo y con mayor calidad”.
También dio la bienvenida a las dotaciones saudíes que han iniciado su formación en el recientemente inaugurado Navantia Training Centre (NTC), que cuenta con equipamiento tecnológico de última generación.
Además, tuvo palabras de agradecimiento para la Armada Española, la Real Marina Saudí y los Ministerios de Defensa de ambos países por su “valiosa colaboración para hacer del programa un éxito”, así como para los equipos del programa y los trabajadores por el esfuerzo realizado.
“Vuestra dedicación, conocimiento y buen hacer nos permiten proclamar con satisfacción que Navantia cumple con sus compromisos. Este cuarto barco, que pronto estará a disposición del cliente, será otra prueba del buen hacer de este astillero, de lo que debemos sentirnos muy orgullosos”, ha afirmado.
Por su parte, el AJEMA, Almirante General Antonio Martorell Lacave, ha subrayado que la corbeta “es una demostración inequívoca de la capacidad industrial de España en el ámbito de la construcción naval y de su fuerte apuesta por la innovación tecnológica”.
El Almirante Martorell Lacave ha agradecido al Vicealmirante Al-Ghofaily y al conjunto de la Marina Real Saudí “la confianza depositada en la Armada española para supervisar la ejecución de este ambicioso y pionero programa naval”, destacando que “esta es la primera vez que la Armada española se ha embarcado en un programa naval de tan largo alcance”.
“Una prueba clara de este compromiso, y del constante avance del programa, es el esfuerzo realizado en la formación de la tripulación de la primera corbeta.
Un ejemplo han sido los cursos de especialización en Combate, Operaciones, Comunicaciones, Navegación y Cubierta, Propulsión y Electricidad, así como el entrenamiento en procedimientos tácticos que se está llevando a cabo actualmente en el Simulador Táctico de la Flota”, ha dicho.
El Comandante de la Marina Real Saudí ha destacado la importancia del proyecto ALSARAWAT (Avante 2200), “uno de los programas de adquisición más importantes y claro indicador del compromiso de la Marina Real Saudí en su ambicioso objetivo de desarrollar una nueva era de capacidades innovadoras y de vanguardia alineadas con la estratégica Visión 2030 del Reino”.
Además, ha subrayado que la botadura de la corbeta Jazan, la cuarta botada en un año, es un logro significativo que demuestra ampliamente el compromiso de Navantia con el programa y ha señalado que el éxito del programa establecerá una base sólida para la asociación estratégica con Navantia.
El Vicealmirante Fahad Al-Ghofaily también ha expresado su gratitud y reconocimiento al AJEMA por el importante apoyo que la Armada Española ha brindado al proyecto.
El consejero delegado de SAMI, a través del vicepresidente de la compañía, ha querido destacar que SAMI está «orgullosa de su asociación estratégica con RSNF y Navantia». “La botadura de JAZAN, la cuarta de las cinco corbetas Avante 2200, reforzará las capacidades de la flota de RSNF, lo que pone de manifiesto el gran interés en el sector de las industrias navales y el compromiso para desarrollar sus nuevos sistemas y requisitos».
“SAMI se dedica a desarrollar las industrias militares de Arabia Saudí y potenciar las capacidades de tecnología naval autóctona, además de contribuir a apoyar el ecosistema de defensa del Reino.
Esto tiene como objetivo lograr la autosuficiencia en el sector mejorando las capacidades técnicas de RSNF. Este logro es consistente con los esfuerzos del Fondo de Inversión Pública a través de SAMI para localizar tecnología de punta y sistemas de defensa y construir asociaciones económicas estratégicas. SAMI juega un papel fundamental en el apoyo a la localización del 50% del gasto militar del Reino y en la mejora de las capacidades locales de acuerdo con los objetivos de Saudi Vision 2030”, ha señalado.
La ceremonia ha concluido cuando el Vicealmirante Fahad Bin Abdullah Al-Ghofaily ha cortado la cinta, con lo que la corbeta Jazan, tras recibir el impacto de la botella con agua de La Meca, se ha deslizado por la grada hasta tocar agua por primera vez.
Los trabajos en la corbeta continuarán en el agua hasta su entrega, prevista para abril de 2023
En su visita, el Comandante Al-Ghofaily ha visitado el astillero de San Fernando y ha conocido el Navantia Training Centre (NTC), un centro equipado con tecnología de última generación donde están recibiendo formación los marineros y mantenedores de las corbetas.
Además, ha conocido los equipos de entrenamiento en tierra (Land Based Training Site, LBTS) y los simuladores, y el programa de Transferencia de Tecnología (ToT) que forma parte de la construcción de las corbetas.
EL PROGRAMA AVANTE 2200
La corbeta Jazan es la cuarta de las cinco que componen el programa Avante 2200.
Tiene una eslora de 104 metros, una manga de 14 y será capaz de transportar a un total de 102 personas entre tripulación y pasaje.
El diseño de las corbetas es de última generación, maximizando a la vez la participación de Navantia mediante la incorporación de productos propios, como el sistema de combate CATIZ, el sistema de comunicaciones integradas HERMESYS, la dirección de tiro DORNA, el Sistema Integrado de Control de Plataforma y el puente integrado MINERVA, junto con otros equipos desarrollados por Navantia bajo licencia, como los motores de MTU, las cajas reductoras de RENK.
Este contrato, en vigor desde noviembre de 2019, fortalece el futuro inmediato de Navantia y beneficia a todos los astilleros de la compañía y a su industria auxiliar, en especial, a toda la Bahía de Cádiz.
Supone una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas que, traducido a empleo, alcanzarán la cifra de 6.000 anualmente durante los próximos 5 años.
De estos, más de 1.100 serán empleados directos, más de 1.800 empleados de la Industria Auxiliar de Navantia y más de 3.000 empleados indirectos generados por otros suministradores. Serán más de 100 las empresas auxiliares que colaboren en el mismo.
El programa, cuyo último buque deberá ser entregado en el año 2024, incluye, además de la construcción, el Apoyo al Ciclo de Vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales.
Por otro lado, el contrato también incluye el suministro de varios servicios, tales como apoyo logístico integrado, adiestramiento operacional y de mantenimiento, suministro de Centros de Formación y Adiestramiento para el Sistema de Combate y Sistema de Control de Plataforma de los buques, el Apoyo al Ciclo de Vida, anteriormente citado, y los sistemas para el mantenimiento de los buques en la Base Naval de Jeddah.