AP Moller-Maersk apunta que los buques neutros en carbono serán comercialmente viables en 2030 y reclama una fuerte participación de la industria.
Maersk ha anunciado su objetivo de acelerar la transición hacia el transporte sin emisiones de carbono, con el que pretende alcanzar trabajar de un modo neutro de carbono para 2050. Para lograr este objetivo, los buques sin emisiones de carbono deben ser comercialmente viables en 2030 y se necesita una aceleración de las innovación y de la adaptación de nuevas tecnologías.
El calentamiento global es uno de los problemas más importantes del mundo y la industria del transporte marítimo es vital, dado que representa alrededor del 80% del comercio mundial. Hasta ahora, las emisiones relativas de CO2 de Maersk se han reducido en un 46% (línea de base de 2007), aprox. 9% más que el promedio de la industria.
A medida que el comercio mundial y los envíos continúan creciendo, las mejoras de eficiencia en la tecnología actual basada en combustibles fósiles no pueden reducir las emisiones ni eliminarlas significativamente.
«La única forma posible de lograr la tan necesaria descarbonización en nuestra industria es transformándonos completamente con nuevos combustibles y cadenas de suministro neutras en carbono», dice Søren Toft, Director de Operaciones de AP Moller – Maersk.
Maersk está esforzándose por resolver problemas específicos del transporte marítimo, ya que requiere soluciones diferentes a las de la automoción, el ferrocarril y la aviación. Se espera que el camión eléctrico que aún está por venir sea capaz de transportar un máximo de 2 TEU y se proyecta que funcione a 800 km por carga. En comparación, un buque portacontenedores que transporta miles de TEU que navegan desde Panamá a Róterdam recorre alrededor de 8.800 km. Con una duración de batería corta y sin puntos de carga a lo largo de la ruta, los desarrollos innovadores son imprescindibles.
Dado el ciclo de vida (20 a 25 años) de una embarcación, es hora de unir fuerzas y comenzar a desarrollar el nuevo tipo de embarcaciones que navegarán los mares en 2050.
La I+D es clave para alejar a la industria de la tecnología actual basada en combustibles fósiles y, al establecer este ambicioso objetivo, Maersk espera implicar a investigadores, desarrolladores de tecnología, inversores, propietarios de carga y legisladores para conseguir una fuerte participación en la industria, el desarrollo conjunto y el apoyo de nuevas soluciones sostenibles en la industria marítima.
En 2019, Maersk planea iniciar un diálogo abierto y colaborativo con todas las partes posibles para abordar juntos uno de los temas más importantes del mundo: el cambio climático.