Veinte y ocho de los fallecidos perecieron ahogados en el lugar del accidente,entre ellos varios niños,y ocho más perdieron la vida en los hospitales a los que fueron trasladados junto al centenar de heridos contabilizados en el accidente,de los que nueve continúan en estado crítico.
El buque que transportaba 124 pasajeros se dirigía hacia el puerto Victoria de Hong Kong para presenciar los fuegos artificiales con motivo de la celebración del día nacional mientras que el ferry realizaba el recorrido contrario.
Un superviviente del accidente explicó al diario local “South China Morning Post” que el choque se produjo diez minutos después de que el buque hundido hubiera iniciado su travesía,momento en el que el ferry embistió por un lateral al barco y éste comenzó a hundirse por la parte de popa de forma inmediata. El ferry apenas sufrió daños en su casco y pudo llegar al puerto sin problemas.
Más de un centenar de personas fueron enviadas a los centros médicos cercanos con síntomas de hipotermia y nueve permanecían en estado crítico,según confirmaron las mismas fuentes a primera hora de la mañana. El balance de heridos y fallecidos podría aumentar ya que las labores de rescate continúan y se desconoce si había más personas en el interior del buque hundido.
El barco hundido era propiedad de la Compañía Eléctrica de Hong Kong y transportaba a empleados y familiares de la empresa en un crucero nocturno para ver los fuegos artificiales desde la turística isla de Lamma hasta el puerto de Hong Kong.
El otro ferry accidentado regresaba a la isla de Lamma,situada a tres kilómetros de Hong Kong,pertenece a la empresa Hong Kong y Kowloon Ferry. El director de operaciones del buque hundido explicó que el barco tenía capacidad para 200 pasajeros e iba equipado con el equipo de salvavidas reglamentario.